lunes, 21 de enero de 2008

Marina 2. Venecia

2 comentarios:

Rosa Cáceres dijo...

Esa luz tamizada de la tarde, esa góndolas en reposo, sin gondolero en ellas, juntas, como en contemplación de la lejana maravilla de la silueta de San Marcos... Poética estampa, relajante para el espíritu, gratificante para la sensibilidad, ideal portada para una novela intimista...¡Ah, si yo conociera Venecia, tal vez la escribiría!

Rosa Cáceres dijo...

¿Qué tal llevas la preparación de tus exposiciones? Por lo que sé, esos eventos requieren mucho trabajo. Que no falten los paisajes murcianos, que me emocionan.